10.14718/revfinanzpolitecon.v15.n2.2023.4

Artículos de investigación
© 2023 Universidad Católica de Colombia.
Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas.
Todos los derechos reservados




Interés por las artes escénicas desde el capital cultural y la educación:
el caso español, 2019

Interest in Performing Arts from Cultural Capital and Education Perspective.
The Spanish Case, 2019


Blas Díaz-León*
Ignacio Martínez-Fernández**
Luis Palma-Martos***

* Economista; doctorando Programa doctorado CEES, Facultad CEYE, Universidad de Sevilla, Ramón y Cajal, 1, Sevilla (España).
bladialeo@alum.us.es
0000-0003-0990-3508

**Economista; Profesor, Departamento Economía e Historia Económica, Facultad CEYE, Universidad de Sevilla, Ramón y Cajal, 1, Sevilla (España).
imfernandez@us.es
0000-0002-3856-1001

***Economista; Doctor en Economía. Profesor, Departamento Economía e Historia Económica, Facultad CEYE, Universidad de Sevilla, Ramón y Cajal, 1, Sevilla (España).
lpalma@us.es
0000-0001-5834-3629


Recibido: 14 de octubre de 2022
Evaluación: 10 de febrero de 2023
Aprobado: 10 de abril de 2023

Cómo citar: Díaz León, B., Martínez Fernández, I., y Palma Martos, L. . (2023). Interés por las artes escénicas desde el capital cultural y la educación: el caso español, 2019. Revista Finanzas Y Política Económica, 15(2) 365-401. https://doi.org/10.14718/revfinanzpolitecon.v15.n2.2023.4


Resumen

Los estudios de participación cultural tienden a concentrar su enfoque en el análisis de las variables socioeconómicas o la disponibilidad de infraestructuras, dejando en un segundo plano variables de carácter idiosincrático como el interés manifestado o la predisposición a participar. Empleando los datos de la Encuesta de Hábitos y Prácticas Culturales de España 2018-2019, y mediante la modelización con mínimos cuadrados ordinarios (MCO), se busca estudiar los pesos de las variables socioeconómicas clásicas, así como las diferentes variables que componen el capital cultural dado su carácter aditivo en el desarrollo del interés. Los principales resultados obtenidos presentan al capital cultural como el componente más determinante en la formación del interés, siendo la lectura en la infancia la que presenta el mayor impacto. Destaca también la posible existencia de transferencia intergeneracional del interés, al presentar un mayor peso entre las variables la participación de los padres que la del propio sujeto durante la infancia.

Clasificación JEL: J14, Z11, C2.

Palabras clave: artes escénicas, participación, interés, preferencia, MCO, tercera edad.


Abstract

Studies on cultural participation tend to focus on the analysis of either socioeconomic variables or the availability of infrastructure. This emphasis overlooks the study of idiosyncratic elements such as manifest interest or predisposition to participate. This research uses the data gathered by the Survey of Cultural Habits and Practices of Spain 2018-2019 and econometric modeling through ordinary least-squares (OLS) in order to examine both the typical socioeconomic variables and the different constitutive elements of cultural capital which take an important role in the development of personal interest. The main results show the cultural capital as the most decisive factor in the development of personal interest; specifically, reading during the childhood stage as the component with the greater impact. Furthermore, it also highlights the possibility of intergenerational transfer of personal interest due to a higher determining value of parent's participation instead of the own person's involvement during childhood.

Keywords: Performing arts; participation; interest; preference; ordinary least-squares (OLS); elderly population.


INTRODUCCIÓN

El cultural es un sector relevante en España, su aportación al producto interno bruto (PIB) en 2019 fue del 2,4%; las artes escénicas exclusivamente alcanzaron el 0,25%. El gasto liquidado en cultura por las administraciones públicas representó 0,46% del PIB en 2019. El gasto liquidado por la Administración General del Estado representaba el 0,06% del PIB, y el 0,1 y 0,3% para las administraciones Autonómica y Local respectivamente. En términos de esfuerzo cultural, para la Administración Local el gasto liquidado cultural representa un 4,85% de su gasto liquidado total, para las administraciones Autonómica y General del Estado es de 0,57 y 0,27% respectivamente. El 70,80% de los espacios teatrales en 2019 eran de titularidad pública y el 73,38% de las salas de concierto, lo que pone de manifiesto el papel de la administración en la provisión de artes escénicas1. Los estudios de demanda cultural son de especial interés.

El consumo cultural y, particularmente, el consumo de artes escénicas en vivo -teatro, ballet y conciertos de música clásica2 - tiene naturaleza intencional3. El interés, como predisposición al consumo, es decir, la tendencia psicológica de un individuo hacia algo, o hacia alguna actividad, es un elemento importante4. La falta de interés es la principal barrera de entrada para la participación en artes escénicas.5 Los economistas no deben obviar y olvidar el conocimiento y la comprensión de este; Chen y Tang (2021) manifiestan la facilidad con la que no se tienen en cuenta la actitud y la motivación como factores psicológicos individuales en la participación.

La generación o el despertar del interés por alguna actividad cultural puede tener un origen interno debido a las propias capacidades formativas individuales, o externo como puede ser la influencia ejercida por personas cercanas y el ambiente social. El interés por un bien cultural puede relacionarse con el propio valor individual del bien en su triple dimensión funcional, simbólica y emocional, como argumenta Tejedor (2008).

La educación alcanzada y el capital cultural son las variables explicativas que más influencia ejercen sobre la participación cultural. Desde la demanda, el capital cultural entendido como stock individual requerido para poder apreciar las artes escénicas y la formación del gusto por las mismas, forma parte de las características propias del consumidor. El capital cultural, entendido como los elementos materiales e inmateriales de un territorio, hace referencia a características de la oferta. En este trabajo, el capital cultural es la capacidad del individuo de apreciar el arte o desarrollar el gusto por él, en el sentido de Bourdieu (1987). Para ello se definen unos elementos configuradores del capital, desde la experiencia adquirida en la infancia y las prácticas de los padres, la participación en otras actividades culturales activas y la formación cultural complementaria.

Algunos autores consideran que a mayores niveles de capital cultural aumenta la probabilidad de éxito educativo y, por ello, la formación del gusto y la capacidad de apreciación de las artes, lo que a su vez aumenta el interés por las mismas, con el consiguiente efecto sobre la participación. El interés no es una variable explicativa como tal, determinante de la forma funcional, sino un argumento de la función de utilidad subyacente; por ello, no la consideran como una variable explicativa de la participación para incluirla en los modelos de participación (Suárez Fernández et al., 2020).

Aunque el capital cultural aumenta la probabilidad del éxito educativo, también hay otros factores que inciden sobre este resultado como, por ejemplo, la disponibilidad de recursos financieros de la familia (véase, por ejemplo, Álvarez-Sotomayor y Martínez-Cousinou, 2016). Si el mecanismo de la formación del interés quedase reducido exclusivamente a la explicación anterior, pueden quedar ocultos y olvidados elementos que participan en la formación de este, y no se estarían considerando elementos externos al propio consumidor. Las personas viven en sociedad, y el consumo cultural tiene un marcado carácter social, en donde cabe la pregunta, por ejemplo, por el papel que juegan los grupos con los que se relacionan los individuos.

La referencia que se realiza en este trabajo a la población mayor se establece por un triple motivo. El fenómeno del envejecimiento de la población española, la mayor distancia de sus experiencias en la infancia a su momento presente y la salida del mercado laboral son características propias de los mayores. Esto último puede servir como marcador del efecto del papel de las relaciones sociales, al dejar de estar vinculado a un grupo activo de trabajo y vincularse con otros grupos de relación.

La explicación y comprensión del interés lleva al economista a acercarse a otras ciencias sociales como la psicología y sociología, con las herramientas del análisis económico. Este análisis puede ayudar a las instituciones públicas y privadas a la toma de decisiones para aumentar el interés por las actividades culturales con medidas a largo plazo, e indirectamente facilitar la participación cultural. En este trabajo se inicia el análisis de los elementos que conforman el interés en artes escénicas en España y forma parte de un estudio más amplio sobre la participación de las personas mayores. Para ello, en este estudio inicial se ha utilizado el método de mínimos cuadrados ordinarios (MCO), sin desconocer otras técnicas como los modelos de regresión probit ordenados y logit multinomial, cuya aplicación se realizará en posteriores trabajos.

Se aporta a la literatura económica la introducción del interés por las artes escénicas como variable dependiente desde la economía, al entender la importancia de esta para la explicación de la participación. Se responde a cómo afectan el capital cultural y sus componentes, así como la educación, en la formación del interés por las artes escénicas en los distintos grupos etarios, con especial referencia a los mayores. Para ello, se utilizan los datos de la Encuesta de Hábitos y Prácticas Culturales (EHPC) de España 2018-2019, elaborada por el Ministerio de Cultura y Deporte. En la participación hay una transmisión intergeneracional: ¿se produce también en el interés? ¿Qué importancia tienen en el interés las experiencias en la niñez y las experiencias de los padres? Para responder estas preguntas se utilizan tres regresiones por MCO diferenciadas por el desglose del capital cultural. Se incluyen además características individuales, sexo, edad, y situación personal y laboral del individuo. Se contribuye a la literatura económica ampliando el conocimiento de la formación del interés por las artes escénicas, puesto que hay abundantes estudios sobre la participación, pero menos sobre el interés.

A continuación, se presenta un breve capítulo de revisión de la literatura, seguido de la exposición metodológica y presentación de resultados, para finalizar con las conclusiones.

REVISIÓN DE LA LITERATURA

Desde la demanda, la literatura económica sobre las artes escénicas gira alrededor de la participación y sus determinantes, su explicación y las características del asistente, pero no se encuentra el análisis del interés como variable dependiente.

Sin embargo, el interés es importante en la participación, Chen y Tang (2021) citan algunos autores que así lo indican (DiMaggio et al., 1978; Andreasen y Belk, 1980; Kangun et al., 1992; Scheff, 1999). Es discutible la oportunidad de incluirlo como variable explicativa; así, para Suárez-Fernández et al. (2020), la relación del interés con la participación es a través del efecto indirecto derivado del capital cultural y educación.

Entendiendo que el interés recoge aspectos que la educación y el capital cultural no explican, se justifica la inclusión de la variable en los modelos de participación, así Chen y Tang (2021), De Sancha et al. (2021), Díaz et al. (2021) y De la Vega et al. (2020) incluyen el interés como variable explicativa. El debate gira en torno a la posibilidad de tratar el interés como variable explicativa, pero no se plantea en ningún momento el interés como variable dependiente objeto de análisis como se hace en este trabajo (Tabla 1).

Tabla 1. Revisión de la literatura según variable

Fuente: elaboración de los autores.


El capital cultural como determinante de la participación ha sido ampliamente tratado desde la economía y sociología. El capital cultural se puede definir como en Bourdieu (1987) y Throsby (2003). En este trabajo se opta por el primero al definirlo como una característica propia del individuo. En Willekens y Lievens (2014) y Yaish y Katz-Gerro (2012) hay evidencias de la incidencia de los diferentes componentes del capital cultural en la participación. Más difícil es encontrar cómo afecta al interés; así, en Suárez-Fernández et al. (2020), a mayor educación mayor capital cultural y, por lo tanto, mayor interés, de tal manera que se puede sustituir el interés por la educación. Parece implícita una relación cuasi lineal.

El capital cultural se puede representar mediante variables sintéticas o por el desglose de sus componentes. Klokker y Jaeger (2022) utilizan componentes principales, y en Fernández y Prieto (2009), el capital cultural se representa mediante una variable agregada similar a la que se aplica en este trabajo, obteniendo por un procedimiento factorial variables sintéticas para la práctica cultural activa, la formación artística, el equipamiento del hogar y la realización de otras actividades culturales y de ocio. En Ateca (2009) no se calcula ninguna variable sintética, e incluye como componentes del capital cultural la educación propia, de los padres y las clases específicas diferenciadas por edad.

Puede encontrarse una revisión de los distintos ítems utilizados para cada tipo de capital cultural en Hashemi et al. (2018). Klokker y Jaeger (2022) incluyen la educación de los padres y abuelos para estudiar la relación intergeneracional. En Grisolía et al. (2010) y Suárez-Fernández et al. (2020), la diferente formación en la infancia recibida por las mujeres puede justificar que las artes escénicas sean una actividad femenina, poniendo de manifiesto la relación entre generaciones. La diferencia en la formación durante la infancia por géneros puede ser mayor entre los mayores, de ahí que el tratamiento de la edad sea fundamental.

Para Nagel (2010), la participación cultural de los padres es más importante que la educación en el periodo entre la adolescencia y la edad temprana adulta, las influencias familiares se asocian más a las diferencias en la participación cultural que la educación. Según Durrer et al. (2020), la cultura está vinculada a la tradición y la familia. Hay un consenso sobre la importancia de la familia y la infancia en la participación, ¿también se encontrará como determinante del interés?

El interés puede ser influido por el entorno social y los grupos de pertenencia. Así, en Roose (2008) el papel de los grupos en las motivaciones en la participación se contempla estableciendo diferentes niveles de interés según los grupos de asistentes a conciertos. También Daenekindt y Roose (2013) sitúan el entorno social como un elemento influyente en la distinción de la participación.

Ante este estado de la cuestión se plantea el análisis de la formación del interés, mediante herramientas econométricas considerando al interés por las artes escénicas como variable dependiente. Puede observarse que la mayor parte de las referencias son sobre el análisis de participación no sobre la determinación del interés que puede entenderse previo a la participación. Se entiende que los grupos son importantes en la configuración del interés y que el capital cultural adquirido en la infancia y en la familia es determinante en la formación del interés a lo largo de la vida.

METODOLOGÍA Y ESTRATEGIA EMPÍRICA

Datos y definición de variables

Los datos utilizados son obtenidos de la EHPC España 2018-2019, del Ministerio de Cultura y Deporte, que cuenta con una muestra de 15.455 observaciones para residentes en España mayores de 15 años, datos recogidos entre marzo de 2018 y febrero de 2019. Hay un capítulo dedicado a las actividades realizadas por los padres y por los niños entre 0 y 14 años, que se entiende de especial interés para la investigación.

Las variables utilizadas en este trabajo se describen en la Tabla 2, estas son usuales en los modelos de participación cultural. Hay que hacer alguna precisión respecto al interés, al capital cultural y la edad.

Tabla 2. Definición de variables

Fuente: elaboración de los autores.


La variable dependiente es el interés declarado por el encuestado, cuyo valor se obtiene de la encuesta al recuperar los resultados a la pregunta realizada (Tabla 2). Las posibilidades de respuesta oscilan entre 0 y 10 de menor a mayor grado de interés, por ello se trata como variable continua.

El capital cultural se considera una variable sintética con cuatro dimensiones, y en un segundo lugar del estudio se descompone en cada uno de los elementos que dan contenido a las dimensiones de la variable sintética como variables individuales independientes. Throsby (2003) define el capital cultural como "activo que incorpora, almacena o genera un valor cultural más allá de cualquier valor económico que posee" (p. 133); mientras para Bourdieu (1987), es la capacidad del individuo que facilita la apreciación cultural. En este estudio, el capital cultural es un recurso individual, es una característica del individuo, por ello se opta por la definición del Bourdieu, que es la que más se ajusta al objeto del trabajo.

A partir de los datos disponibles y teniendo en cuenta la consideración de capital cultural en Bourdieu (1987), que distingue entre el capital cultural objetivado, institucionalizado e incorporado, mediante el método de componentes principales se obtiene la variable sintética de capital cultural. En este trabajo, el capital cultural acumulado se divide en tres aspectos o conductas llevadas a cabo por los individuos en su vida: 1) realización de prácticas activas en diferentes actividades culturales, 2) formación en diferentes actividades culturales y 3) exposición temprana a prácticas o actividades culturales (exposición en la niñez y ámbito familiar). La exposición temprana se ha dividido en exposición específica a las artes escénicas y no específica para el resto de las prácticas culturales. Atendiendo a estos aspectos, se plantea la siguiente estructura para la variable:


De la EHPC se han seleccionado las cuestiones recogidas en la Tabla 3, que hacen referencia a estos elementos para dotar de contenido a las dimensiones que conformarán la variable sintética de capital cultural. Puede observarse que la educación alcanzada no se ha incluido en la formación de capital cultural.

Tabla 3. Elementos del capital cultural

Fuente: elaboración de los autores.


Extraídos estos datos se componen las dimensiones internas del capital cultural. Para las variables compuestas por más de una cuestión, se emplean sus componentes principales para maximizar el uso de información latente minimizando el ruido derivado de la inclusión de un gran conjunto de nuevas variables (Xie, 2019). Con las variables instrumentales resultado de este proceso, se repite el método de componentes principales para la construcción de la variable sintética de capital cultural, tomándose el primer componente al ser el que permite explicar una mayor parte de la varianza (Bro y Smilde, 2014). Para la generación de nuevas variables explicativas mediante el uso de componentes principales, este proceso sigue la estructura planteada en Voda et al. (2018) (Tabla 4).

Tabla 4. Resultados de estimación de componentes principales para el capital cultural

Fuente: elaboración de los autores.


La variable de capital cultural construida permitirá, por tanto, reflejar de forma fiel no solo el conjunto de datos del que ha sido extraída (Smith, 2002), sino las facetas de la adquisición de capital cultural a lo largo de la vida de los agentes. La construcción así establecida deja fuera del mismo a la educación tanto de los padres como la alcanzada por el encuestado, estableciendo una separación entre ambas variables. Se considera como capital cultural lo que para Bourdieu es el capital incorporado compuesto por el hábito y la experiencia en la infancia, excluyendo el capital objetivado que comprendería los medios materiales y el institucionalizado que comprendería la educación alcanzada.

Para tratar la edad, al no tener acceso directamente, se ha considerado el año 2019 menos el año de nacimiento. Se han dividido en siete rangos etarios: Edad 1, 15-24; Edad 2, 25-34; Edad 3, 35-44; Edad 4, 45-54; Edad 5, 55-64; Edad 6, 65-74; Edad 7, más de 75.

Estrategia empírica

El estudio es transversal, no longitudinal. Se considera cómo se relacionan las variables explicativas con el interés para cada uno de los grupos de edad, con especial referencia a la educación y los componentes del capital cultural. Un estudio longitudinal facilitaría la comprensión de la evolución del interés manifestado por una población a lo largo del tiempo, pero no es el caso de estudio. El análisis empírico realizado inicia con una presentación descriptiva del comportamiento del interés manifestado y las correlaciones que presenta el interés con los componentes del capital cultural y la educación alcanzada.

Al buscarse los pesos específicos que definen el interés manifestado, y no la probabilidad de estar interesado en artes escénicas, se utiliza en este trabajo el método MCO. Por ello, tras el análisis empírico, se presentan tres modelos MCO para el total de observaciones (MI, MII y MIII), cuya variable dependiente explicada es el interés medio por las artes escénicas. Se diferencian por el nivel de desglose del capital cultural, de menor a mayor desagregación. En una tercera etapa, los tres modelos se replican para cada uno de los siete grupos de edad y también para cada arte escénica. Debido al diferente comportamiento sobre el interés manifestado por el grupo de mayores al distinguir entre participantes y no participantes, como última etapa de análisis se divide la población entre ellos.

RESULTADOS

Interés por las artes escénicas

La Tabla 5 y la Gráfica 1 recogen el interés por las artes escénicas por grupos de edad. De los datos se desprende el escaso interés que despiertan. El interés medio es creciente hasta alcanzar el grupo de los mayores (edad 6), y cae en los muy mayores de 4,82 a 4,07. La caída es producto del diferente comportamiento entre participantes y no participantes. Los muy mayores que participan tienen el mayor interés, los no participantes presentan el menor interés. Las mayores diferencias en el interés entre participantes y no participantes se encuentran en el grupo de los muy mayores, el interés de los no participantes representa el 0,54 del interés de los participantes.

Tabla 5. Interés por grupos de edad

Fuente: elaboración de los autores, con base en datos de la EHPC España, 2018-2019.


Gráfica 1. Interés por grupos de edad

Fuente: elaboración de los autores con base en datos de la EPHC 2018-2019 España.


¿Cómo puede explicarse que en los muy mayores el interés caiga entre los no participantes y no entre los participantes? El conocimiento, la formación y las experiencias de participación previas pueden justificar el aumento del interés entre los participantes muy mayores, pero no por qué cae entre los no participantes. Otras razones deben producir ese efecto en el interés. Quizá en la formación del interés haya elementos exógenos al individuo (por ejemplo, la influencia ejercida por grupos con los que se relaciona). Una vez que estas circunstancias ajenas desaparecen (por ejemplo, con la salida del mercado de trabajo), el impacto negativo registrado en el interés es de mayor intensidad entre los que presentan menores niveles de interés, como es el caso de los no participantes. De esta manera, el interés cae entre los no participantes, pero no entre la población que participa. Puede plantearse que hay un componente del interés "prestado", no intrínseco al individuo, cuya motivación sean las propias relaciones sociales. Entre los participantes que ya han desarrollado un interés propio por las artes escénicas, la influencia del grupo y el resto de los factores ajenos al individuo deja de ser tan importante para la percepción de interés. El grupo de relación puede considerarse como un elemento importante en los inicios de la formación del interés (con valores de interés más bajos), pero no una vez que el hábito de participación haya sido adquirido (una vez alcanzados unos valores de interés mínimos).

El papel realizado por los grupos puede contemplarse en Roose (2008), que establece distintos grupos de asistentes a los conciertos para los que es fundamental el motivo de la asistencia como elemento diferencial; así, hay un círculo interno que presenta un interés intrínseco, mientras que hay un grupo de asistentes con motivos extrínsecos para asistir como puede ser pasar una noche con los amigos o haber sido invitados. También Daenekindt y Roose (2013) sitúan el entorno social como un elemento influyente en la distinción de la participación: "para los socialmente móviles, las actividades culturales públicas están más fuertemente relacionadas con el nuevo entorno social que las actividades que son discretas y limitadas a la privacidad de los hogares".

La formación del interés por las artes escénicas a la luz de las relaciones personales sería un objeto de estudio interesante, planteando que en el interés hay un componente interno "propio" del individuo que depende de él y de las experiencias que vaya adquiriendo, y un componente externo que viene determinado por el entorno en el que se desenvuelve. También parece que puede establecerse un escalón, un umbral en el interés a partir del cual el componente externo pase a un segundo plano, con poca influencia en la formación del interés y su posterior efecto en la participación.

Los valores del interés manifestado para cada una de las actividades culturales individualmente confirman, en líneas generales, lo indicado en el párrafo anterior. Para los muy mayores no participantes el interés cae, y si participan aumenta, salvo para el ballet. Los datos pueden resumirse de la siguiente manera:

El interés medio entre los participantes para todas las artes es bastante mayor que entre los no participantes. El valor medio del interés para los no participantes oscila entre el 70% (ballet Edad 1) y 47% (ballet Edad 7) del interés entre los participantes.

Las mayores diferencias entre participantes y no participantes se producen en el grupo de más edad (más de 75 años), al coincidir la caída del interés entre los no participantes y el mantenimiento o aumento del interés entre los participantes, de tal manera que el interés de los no participantes representa el 53% (teatro), 47% (ballet) y 52% (conciertos) del interés de los participantes.

Los principales motivos para no asistir son la falta de interés y de tiempo. Las tablas 6, 7 y 8 recogen los porcentajes en que se eligen como primera o segunda opción. Para la muestra completa, entre los mayores de 75 años la falta de interés se manifiesta como razón para no asistir con mayor intensidad que en el otro grupo de mayores. La falta de interés como primer motivo oscila entre los no participantes entre el 36,57 y el 49,86%, mientras que entre los participantes oscila entre el 6,95 y el 11,68%. Entre los muy mayores este motivo tiene mayor presencia en los no participantes, complementando lo indicado con relación al interés manifestado. Como reflejo del mayor tiempo disponible, la falta de tiempo pierde peso entre las razones para la participación en los grupos de mayor edad, como se aprecia en las tablas 6, 7 y 8.

Tabla 6. Motivos para no ir más veces (muestra completa) (%)

Fuente: elaboración de los autores, con base en datos de la EHPC España, 2018-2019.


Tabla 7. Motivos para no ir (entre los participantes) (%)

Fuente: elaboración de los autores, con base en datos de la EHPC España, 2018-2019.


Tabla 8. Motivos para no ir (entre los no participantes) (%)

Fuente: elaboración de los autores, con base en datos de la EHPC España, 2018-2019.


La diferencia entre participantes y no participantes puede hacer pensar en la existencia de un umbral de interés mínimo, a partir del cual se produce el círculo virtuoso participación-interés. Esto obliga conocer sobre la formación del interés como elemento clave en la participación, y tener como población objetivo tanto el grupo de los participantes como el de los no participantes.

Correlación entre variables

En la Tabla 9 se recogen las correlaciones de los elementos del capital cultural y el nivel educativo con el grado de interés para la muestra completa.

Tabla 9. Correlación entre educación y capital cultural

Significatividad al 5%.
Fuente: elaboración de los autores, con base en datos de la EHPC España, 2018-2019.


El interés medio por las tres artes para la muestra completa presenta su máxima correlación con la variable sintética del capital cultural (0,3793), seguido del nivel de estudios (0,2982). Si se avanza al mayor desglose, obviando la variable sintética de capital y considerando los componentes de este, individualmente no alcanzan el nivel de correlación obtenido para la educación, pero tras ella la lectura frecuente del niño y de los padres son los elementos que presentan mayor correlación con el interés, con valores superiores a la asistencia frecuente por los niños o los padres a las artes escénicas. Las mismas actividades realizadas por los niños en su infancia tienen mayor correlación que las realizadas por los padres.

Al dividir la muestra entre participantes y no participantes, los índices de correlación presentan matices. Las correlaciones son menores para cada grupo que para la muestra completa. El interés presenta las mayores correlaciones con el capital cultural en ambos grupos, pero el nivel de estudios cede su segunda posición a la lectura frecuente en la infancia, presentando mayores valores en ambos casos en el grupo de no participantes.

Las correlaciones del interés por las actividades escénicas con las prácticas específicas en artes escénicas son menores que las correlaciones del interés con el resto de las actividades culturales realizadas en la infancia. Esto puede mostrar que lo que se realice en la infancia debe estar más dirigido a crear una base para una futura formación del interés a lo largo de la vida, que no una introducción directa en prácticas culturales de alta cultura para las que a esas edades aún falta formación previa y que tendrán por ello menor reflejo en el futuro interés al no haberse realizado con capacidad para apreciar el arte. Además, entre las prácticas no específicas se encuentra la lectura en la infancia, que es la actividad que presenta mayor correlación con el interés.

Puede plantearse la idea de que el capital cultural formado en la infancia y por el entorno familiar es importante, pero no determinante en la configuración del interés. De las actividades realizadas, la lectura frecuente -principalmente en la edad infantil- es la que tiene una mayor correlación con la formación del interés por las artes escénicas.

En cuanto a las correlaciones entre los distintos componentes del capital cultural y la educación, puede apreciarse que tienen un comportamiento similar al estimado para el interés, pudiendo realizarse las mismas indicaciones para ellas. De tal manera que la lectura frecuente se distingue del resto de actividades.

Educación alcanzada y capital cultural en la infancia

Previo al análisis de la formación del interés, se presenta un breve estudio de la relación entre la educación y el capital cultural adquirido en la infancia. Se realiza una regresión por MCO, cuya variable dependiente es el nivel de estudios, y los regresores son las actividades realizadas durante la infancia y por los padres (Tabla 10). El logro educativo alcanzado está determinado positivamente en el modelo por la lectura frecuente tanto de los padres como de los niños, y por la asistencia frecuente a los museos por los padres y al cine por los niños. El resto de las actividades culturales realizadas en el hogar durante la infancia no presentan influencia en el logro educativo. Estos datos son consistentes con la idea de que el ambiente familiar y el capital cultural adquirido en la infancia tienen un importante papel en la consecución de los logros educativos; aunque también hay otros factores de enorme importancia como los recursos financieros de la familia (Álvarez-Sotomayor y Martínez-Cousinou, 2016).

Tabla 10. MCO: muestra total según nivel de estudios

*/ **/ *** significatividad al 10, 5 y 1%, respectivamente.
Fuente: elaboración de los autores, con base en datos de la EHPC España, 2018-2019.


Regresiones por MCO para el conjunto de la muestra

Se establecen tres modelos por MCO cuya variable dependiente es el interés medio (Tabla 11). En MI el capital cultural está representado por la variable sintética definida, así se compara el efecto de la educación y el capital cultural en conjunto. En MII se desglosa el capital cultural en sus componentes -formación, intensidad de otras prácticas culturales, prácticas en la infancia realizada por los niños y prácticas de los padres-, diferenciando entre artes escénicas específicas y otras prácticas culturales; de esta manera, puede establecerse cómo influyen las dimensiones definidas del capital cultural. En MIII se individualiza cada uno de los componentes, alcanzando el mayor desglose posible, y permite particularizar qué actividad de las formadoras del capital cultural determina el interés.

Tabla 11. MCO. Variable dependiente de interés medio por artes escénicas

*/ **/ *** significatividad al 10, 5 y 1%, respectivamente.

Fuente: elaboración de los autores, con base en datos de la EHPC España, 2018-2019.


En los tres modelos se observa que tener o no cargas familiares no tiene efecto en la formación del interés por las artes escénicas. El ser mujer y la edad aumentan el interés, mientras que el estar activo lo reduce. El capital cultural influye más que la educación en el interés. El desglose del capital cultural reduce todos los valores de las variables explicativas (MIII). La realización de cursos de formación cultural está relacionada positivamente con el nivel de interés mostrado. La intensidad en otras prácticas culturales también determina el nivel de interés por las artes escénicas; no solo realizar otras prácticas culturales, también la intensidad de estas influye significativamente en el interés alcanzado.

No todas las prácticas realizadas por los padres tienen influencia en el interés futuro por las artes escénicas. La lectura y el cine realizadas por los niños o los padres influyen positivamente en el interés que se alcanzará, con una diferencia en la lectura frecuente en la infancia, la variable con mayor impacto en el interés futuro 0,596327. La participación de los padres en artes escénicas es significativa, no así la de los niños; el interés en artes escénicas depende más de las actitudes de los padres ante la participación en artes escénicas que de la participación directa del niño. Puede hablarse de un efecto imitación, lo que se ve hacer a los padres tiene una gran influencia en el comportamiento de los niños y su configuración de valores futura. La participación temprana en artes escénicas no tiene ningún impacto en el futuro interés mostrado, no es significativa en MIII; quizá la falta de un stock de capital cultural mínimo que facilite la apreciación temprana de la alta cultura produzca que su consumo no aporte valor a la experiencia y no genere un interés inicial. Estos resultados parecen confirmar el planteamiento de la reproducción social de Bourdieu.

Regresiones MCO por grupos de edad

Para replicar los tres modelos anteriores por grupos de edad, se suprimen como variables la edad y su cuadrado. Los resultados de las regresiones se muestran en la Tabla 12. Para todos los grupos de edad, los coeficientes del capital cultural son mayores que los correspondientes a la educación (MI). Los elementos del capital cultural más interesantes son las actividades realizadas durante la infancia y por los padres (Modelo III). La participación frecuente en artes escénicas por los padres tiene efecto en las edades adultas (Edades 3 y 4) y en el grupo de los muy mayores (Edad 7); la participación en artes escénicas durante la infancia solo afecta al interés en las edades más jóvenes (Edades 1 y 2) perdiendo su influencia en el resto de grupos etarios. Esto puede hacer pensar que en los grupos más jóvenes la participación en artes escénicas influye en su interés, pero que dicho efecto se pierde en edades más avanzadas, donde el papel relevante en la formación del interés lo adquiere el ambiente familiar, puesto que es la práctica de los padres en artes escénicas la que sí adquiere significatividad.

Tabla 12. MCO. Variable dependiente interés artes escénicas por edad

*/ **/ *** significatividad al 10%, 5% y 1%, respectivamente.
Fuente: elaboración de los autores, con base en datos de la EHPC España, 2018-2019.


La lectura en la infancia influye en la formación del interés por las artes escénicas en todos los grupos. La lectura de los padres solo tiene reflejo en el interés hasta las edades maduras, perdiendo su significatividad en los tres grupos de más edad. La educación es significativa en todos los grupos. Hay una diferencia enorme entre la educación y las actividades realizadas durante la infancia y el hogar, la educación es una característica que acompaña el presente del individuo mientras que las actividades realizadas en la infancia temporalmente están cada vez más lejanas según avanza la edad, pertenecen al pasado. Quizá el efecto indirecto de esas actividades en el interés se exprese a partir de la educación, puesto que el capital cultural de la infancia tiene un efecto importante en el nivel educativo alcanzado. El capital cultural de la infancia se refleja en el nivel educativo. El cine es otra actividad que tanto realizada directamente por los niños o los padres influye en la formación del interés en todos los grupos de edad. Se debe mencionar el hecho de que realizar cursos de formación cultural no tiene repercusión en el interés por las artes escénicas. La intensidad de realización de prácticas culturales activas sí tiene una importante influencia en el interés, el aumento de prácticas realizadas incrementa el interés manifestado.

De MIII, destaca el importante papel de la lectura y el cine en la formación del interés y la falta de efecto de la participación en artes escénicas durante la infancia en este. Los grupos de los mayores presentan dos diferencias con el resto. Primero, la participación en artes escénicas por los padres sí es significativa en los muy mayores al igual que en los grupos Edad 3 y Edad 4, pero no en el resto de las edades; y segundo, la lectura frecuente de los padres ha perdido influencia en la formación del interés.

Al replicar los modelos para cada una de las artes (tablas 13, 14, 15), se reproducen básicamente las mismas cuestiones indicadas anteriormente, aunque con particularidades debido a la propia naturaleza de cada arte. La educación es s ignificativa en todos los grupos etarios, y la lectura en la infancia es la práctica infantil de mayor impacto en los distintos grupos. La asistencia al cine durante la infancia también afecta el interés, aunque difiere su papel según el tipo de arte; parece que se relaciona más con el interés por el teatro que por el resto de artes. Pero la inefectividad de la participación en artes escénicas en la infancia en la formación del interés en casi todos los grupos de edad es el aspecto más significativo; de tal manera, que la participación en artes escénicas de los padres es más importante para la configuración del interés en cualquier arte que la propia actividad realizada en la infancia por los niños.

Tabla 13. MCO Teatro

*/ **/ *** significatividad al 10, 5 y 1%, respectivamente.
Fuente: elaboración de los autores, con base en datos de la EHPC España, 2018-2019.


Tabla 14. MCO: ballet

*/ **/ ***  significatividad al 10, 5 y 1%, respectivamente.
Fuente: elaboración de los autores, con base en datos de la EHPC España, 2018-2019.


Tabla 15. MCO: conciertos

*/ **/ *** significatividad al 10, 5 y 1%, respectivamente.
Fuente: elaboración de los autores, con base en datos de la EHPC España, 2018-2019.

Regresiones MCO para participantes y no participantes

Al distinguir entre población participante y no participante (tablas 16, 17, 18) no se observan grandes diferencias con lo comentado para el conjunto de la población (ver Tabla 18). La educación, la intensidad en las prácticas, la lectura en la infancia y la de los padres, así como la asistencia frecuente de los padres al cine, se repiten como variables significativas en ambos grupos. Las variables del capital cultural consideradas muestran un comportamiento similar entre los dos grupos, salvo que solo entre los participantes la participación de los padres en artes escénicas, la formación cultural y la asistencia frecuente a museos en la infancia afecta al interés manifestado; y entre los no participantes la asistencia al cine es significativa (ver MIII).

Al observar por grupos de edad (tablas 16 y 17), en los dos de mayor edad puede apreciarse que, entre los participantes (nivel de interés más alto), la conducta de los padres en lectura y cine, así como la lectura en la infancia son las variables significativas, mientras que en el caso de los no participantes (menor interés), solo la lectura de niño ejerce influencia en el interés. Esta situación da lugar a pensar que es la participación realizada por los padres lo que supone un plus en la generación de interés. Así, entre los mayores, las actividades que se realizaron en la niñez establecen un nivel mínimo de interés y las prácticas de los padres son las que suponen un plus en ese nivel de interés. La lectura en la infancia es el elemento clave que determina la posibilidad de alcanzar un nivel de interés mínimo que favorezca la participación futura. Alcanzados esos niveles mínimos, el plus lo establecen otras cuestiones, como el ambiente en el que se desenvuelva, llámese el hogar u otros grupos de relación, por ello hay actividades que en el grupo de mayores participantes realizadas por los padres son significativas. Alcanzado el nivel mínimo de interés que implica la participación, los propios consumos pasados revierten sobre el interés alcanzado.

Tabla 16. Interés medio por edades (participantes)

*/ **/ *** significatividad al 10, 5 y 1% respectivamente.
Fuente: elaboración de los autores, con base en datos de la EHPC España, 2018-2019. Solo se muestran los valores significativos.


Tabla 17. Interés medio por edades (no participantes)

*/ **/ *** significatividad al 10, 5 y 1% respectivamente.
Fuente: elaboración de los autores, con base en datos de la EHPC España, 2018-2019. Solo se muestran los valores significativos.


Tabla 18. Interés medio

*/ **/ *** significatividad al 10, 5 y 1%, respectivamente.
Fuente: elaboración de los autores, con base en datos de la EHPC España, 2018-2019. Solo se muestran los valores significativos.


La diferenciación entre participantes y no participantes muestra que la lectura en la infancia es significativa en todas las edades para no participantes; para los participantes solo lo es para los grupos Edad 1, Edad 5 y Edad 7. Esta situación refuerza lo indicado en el párrafo anterior; la participación precisa de un nivel mínimo de interés que está relacionado con los niveles de lectura en la infancia, pero que una vez alcanzado ese mínimo que posibilita la participación, el interés tiene otros elementos que lo configuran como puede ser el propio hogar, pues la lectura de los padres es significativa para algunos grupos de edad entre los participantes. El papel principal realizado por la lectura en la infancia puede ser el responsable de la caída del interés entre los muy mayores al presentar diferentes hábitos de lectura en sus infancias, lo que supone un hándicap para la formación del interés.

CONCLUSIONES

A partir de este trabajo inicial, que pretende poner en el centro del debate la formación del interés, se desprende que la educación y el capital cultural en sus distintos componentes tienen un efecto muy importante en la formación del interés despertado por las artes escénicas a lo largo de la vida, aunque haya otros posibles elementos influyentes. Se puede pensar que en la formación del interés por las artes escénicas hay un elemento interno de interés propio del individuo y un componente externo formado por causas ajenas este, que se modifica en el tiempo. Estos dos elementos configuran el nivel de interés en cada momento de la vida.

Los componentes de capital cultural que han sido considerados para el análisis son los que presentan menores problemas metodológicos puesto que relacionan las actividades realizadas durante la infancia. Hemos visto que estas actividades tienen una gran incidencia en el nivel educativo alcanzado, pero más allá del efecto en el interés a partir de la educación, presentan efectos propios sobre el interés diferentes a los indirectos que se derivan de la educación.

Es muy importante el hecho de que en los grupos de mayores los efectos directos de la asistencia a artes escénicas en la infancia en el nivel de interés sea menor que en edades más tempranas. Hay una pérdida de influencia en los grupos de edad más avanzada (Tabla 12). Puede entenderse que el papel jugado por las prácticas en la infancia es más bien de formación inicial del interés, que debe después desarrollarse y potenciarse. Por ello en los grupos de edad de los mayores no tienen significatividad.

Las actividades de la infancia que afectan el interés son la lectura y el cine, tanto las realizadas directamente por el individuo como el efecto reflejo de la participación de los padres. El hecho de que la participación en artes escénicas en la infancia no tenga ninguna influencia sobre la formación del interés pone de manifiesto que el consumo de artes escénicas en edad temprana, cuya formación cultural/personal no posibilita la completa aprehensión de estas, no parece ser una buena medida para el fomento de las actividades en el futuro. En los primeros años deben realizarse actividades para adquirir una formación cultural básica más que la introducción en las artes de alta cultura en las que es necesario contar con un elevado capital cultural para su apreciación. Es más interesante la formación básica, de preparación para futuros consumos, que la participación temprana. Entre esta formación básica está la lectura (que además favorece el acceso a mayores niveles educativos) como actividad fundamental e imprescindible para iniciar y aumentar el interés por las artes escénicas en un futuro. También, en menor medida lo es el cine (el consumo de cine requiere menos capital previo para su apreciación que las artes escénicas). La participación específica en artes escénicas efectuada por los padres sí tiene un efecto en el interés, debido a un posible efecto imitación.

El hogar puede considerarse como el grupo en el que se forma inicialmente el interés que debe alimentarse a lo largo de la vida mediante las relaciones con otros grupos de relación y las experiencias adquiridas. Así, las actividades de la infancia tienen mayor significatividad en las edades tempranas, perdiéndose en los grupos de edad más avanzada. El interés generado inicialmente en la infancia debe ser alimentado a lo largo de los distintos momentos de la vida puesto que, en caso contrario, el interés puede decaer.

La consideración por artes y grupos de participantes y no participantes no muestra diferencias significativas y evidentes, con la salvedad del menor interés mostrado por los no participantes y la caída en los muy mayores.

Al observar los dos grupos de mayores, entre participantes y no participantes se observan indicios de que es la práctica realizada por los padres la que aporta un plus al interés generado por el individuo por sí, que lo eleva a niveles de interés de participación, puesto que los participantes tienen como variable explicativa el cine y la lectura de los padres, mientras para los no participantes no hay aportación de los padres a la formación del interés. Las prácticas de los padres justifican la diferencia entre los niveles de interés alcanzados por los participantes y no participantes.

La importancia concedida a los padres y el ambiente familiar en las diferencias de interés es coincidente con los trabajos de participación de Durrer et al. (2020), Nagel (2010) y Daenekindt y Roose (2013), quienes también conceden a los padres y a la familia un papel fundamental en las diferencias de participación cultural.

La principal medida de política cultural desde las instituciones públicas y privadas, para aumentar el interés futuro por las actividades de alta cultura y, específicamente, las artes escénicas en vivo, consiste en fomentar la lectura frecuente por ocio en los niños.

También debe considerarse la realización de actividades con pocas necesidades de capital cultural para su consumo que despierten el interés en el niño. Las medidas tendentes al fomento de la participación en actividades con grandes necesidades de capital cultural en la infancia no parecen ser efectivas en la generación de un interés por las artes escénicas.

No hay que olvidar las medidas tendentes a la creación de un clima cultural tanto en el hogar como en otros ámbitos sociales. En el hogar, los padres sirven de ejemplo de consumo, y sus efectos se verán reflejados en el futuro. La lectura frecuente por ocio entre los padres es significativa en la conformación del interés. Estas ideas ponen el foco en el papel que desempeñan los grupos en el consumo cultural como actividad socializadora y socializante.

Para próximas investigaciones, además de la aplicación de otros modelos econométricos de tipo ordenado y multinomiales que corrijan la limitación de la aplicación de MCO, sería interesante profundizar en los mecanismos de formación del interés, puesto que el interés por las artes cambia a lo largo de la vida, y se presenta un comportamiento diferente ente participantes y no participantes. Como no hay datos para realizar un estudio longitudinal, una herramienta posible sería la aplicación de técnicas de pseudopanel.

AGRADECIMIENTOS Y FINANCIACIÓN

Se agradecen los comentarios oportunos de los evaluadores que han mejorado el trabajo. La investigación no ha recibido financiación alguna, ni pública ni privada. Blas Díaz León, autor de correspondencia. El trabajo tiene carácter coral. Los autores declaran no tener ningún conflicto de interés potencial.


NOTAS

1 Según los Anuarios de Estadísticas Culturales de 2020, 2021 y 2022, elaborados por el Ministerio de Cultura y Deportes.

2 En este trabajo se han seleccionado estas artes al presentar el mayor grado de participación: teatro 24,85%; conciertos 9,60%; ballet 8,08%; ópera 3,28% y zarzuela 1,64%; según datos de la Encuesta de Hábitos y Prácticas Culturales (EHPC), España, 2018-2019.

3 Unesco (2006), citado por Aguado y Palma (2015).

4 Se emplea la expresión interés como "interés manifestado", en lugar de otras expresiones como preferencias o valor individual, al utilizarse ampliamente en la literatura como en Chen y Tang (2021), y adaptarse el término a la denominación de la EPHC 2018-2019.

5 La falta de interés es el motivo más frecuente expresado para no participar más en las artes escénicas.


REFERENCIAS

1. Aguado, L. & Palma, L. (2015). Factores que limitan la participación cultural. Una mirada desde la economía de la cultura. Revista de Ciencias Sociales. Universidad del Zulia, 21 (1), 58-71. https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=28037734006.

2. Álvarez-Sotomayor, A. y Martínez-Cousinou, G. (2016). ¿Capital económico o cultural? El efecto del origen social sobre las desventajas académicas de los hijos de inmigrantes en España. Papers, 101 (4), 527-554. http://dx.doi.org/10.5565/rev/papers.2200.

3. Ateca-Amestoy, V (2009). El capital humano como determinante del consumo cultural. Estudios de Economía Aplicada, 27(1), 87-110. https://doi:10.25115/eea.v27i1.4851.

4. Bourdieu, P (1987). Los tres estados del capital cultural. Sociológica, 2(5), 11-17. http://www.sociologicamexico.azc.uam.mx/index.php/Sociologica/article/view/1043/1015.

5. Bro, R., & Smilde, A. K. (2014). Principal component analysis. Analytical Methods, 6(9), 2812-2831. http://doi.org/10.1039/c3ay41907j

6. Chen, G., & Tang, P (2021). Similar but special: An econometric analysis of live performing arts attendance in mainland China. Journal of Cultural Economics, 45(3), 459-490. https://doi.org/10.1007/s10824-021-09422-7

7. Daenekindt, S., & Roose, H. (2013). Cultural chameleons: Social mobility and cultural practices in the private and the public sphere. Acta Sociológica, 56(4), 309-324. http://doi.org/10.1177/0001699313496589

8. De la Vega, P, Suárez-Fernández, S., Boto-García, D., & Prieto-Rodríguez, J. (2020). Playing a play: Online and live performing arts consumers profiles and the role of supply constraints. Journal of Cultural Economics, 44(3), 425-450. https://doi.org/10.1007/s10824-019-09367-y

9. De Sancha-Navarro, J. M., Lara, J., Oliver-Alfonso, M. D., & Palma Martos, L. (2021). Cultural Sustainability in University Students' Flamenco Music Event Attendance: A Neural Networks Approach. Sustainability, 13(5), 2911. https://doi.org/10.3390/su13052911.

10. Díaz León, B., Martínez Fernández, I., & Palma Martos, L. (2021). Temporal restriction and interest for the elderly on cultural participation. The case of spanish performing arts 2019. Scientific Annals of Economics and Business, (68), 35-52. https://doi.org/10.47743/saeb-2021-0030.

11. Durrer, V., Kelly, G., McKnight, M., & Schubotz, D. (2020). Exploring young people's understanding of culture: A study from Northern Ireland. Cultural Trends, 29(1), 4-18. https://doi.org/10.1080/09548963.2019.1692184 .

12. Fernández Blanco, V., & Prieto Rodríguez, J. (2009). Análisis de los hábitos de lectura como una decisión económica. Estudios de Economía Aplicada, 27(1), 111-135. www.revista-eea.net/documentos/27111.pdf

13. Grisolía, J. M., Willis, K., Wymer, C., & Law, A. (2010). Social engagement and regional theatre: Patterns of theatre attendance. Cultural Trends, 19(3), 225-244. https://doi.org/10.1080/09548963.2010.495277

14. Hashemi, N., Sebar, B., & Harris, N. (2018). The relationship between cultural capital and lifestyle health behaviours in young people: A systematic review. Public Health, (164), 57-67. https://doi.org/10.1016/j.puhe.2018.07.020

15. Klokker, R. H., & Jœger, M. M. (2022). Family background and cultural lifestyles: Multigenerational associations. Poetics, (92), 1-13. https://doi.org/10.1016/j.poetic.2022.101662

16. Nagel, I. (2010). Cultural participation between the ages of 14 and 24: Intergenerational transmission or cultural mobility? European Sociological Review, 26(5), 541-556. https://doi:10.1093/esr/jcp037

17. Roose, H. (2008). Many-voiced or unisono? An inquiry into motives for attendance and aesthetic dispositions of the audience attending classical concerts. Acta Sociológica, 51 (3), 237-253. https://doi.org/10.1177/0001699308094168

18. Smith, L. I. (2002). A tutorial on principal components analysis. http://www.iro.umontreal.ca/~pift6080/H09/documents/papers/pca_tutorial.pdf

19. Suárez-Fernández, S., Prieto-Rodríguez, J., & Pérez-Villadóniga, M. J. (2020). The changing role of education as we move from popular to highbrow culture. Journal of Cultural Economics, 44 (2), 189-212. https://doi.org/10.1007/s10824-019-09355-2

20. Tejedor Estupiñán, J. M. (2008). Economía de la cultura en los museos de la Uptc: el caso del museo casa cultural Gustavo Rojas Pinilla 2004-2005. Apuntes del Cenes, 27(45), 269-291. https://revistas.uptc.edu.co/index.php/cenes/article/view/3094

21. Throsby, D. (2003) El capital cultural. En R. Towse (Ed.), Manual de economía de la cultura (pp. 131-135). Fundación Autor.

22. Voda, A. I., Martinez, I., Tiganas, C. G., Maha, L. G., & Filipeanu, D. (2019). Examining the effects of creativity and willingness to take risk on young students' entrepreneurial intention. Transformations in Business & Economics, 18(2A) (47A), 469-489. http://www.transformations.knf.vu.lt/47a

23. Willekens, M., & Lievens, J. (2014). Family (and) culture: The effect of cultural capital within the family on the cultural participation of adolescents. Poetics, (42), 98-113. https://doi.org/10.1016/j.poetic.2013.11.003

24. Xie, X. (2019). Principal Component Analysis. https://www.ics.uci.edu/~xhx/courses/CS273P/12-pca-273p.pdf

25. Yaish, M., & Katz-Gerro, T (2012). Disentangling 'cultural capital': The consequences of cultural and economic resources for taste and participation. European Sociological Review, 28(2), 169-185.



Inicio